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domingo, 4 de junio de 2017

The Pink Floyd Exhibition - Their Mortal Remains


Ya teniamos las entradas para ir a ver a EC al RAH, ya teniamos los aviones, ya teniamos el hotel ligado ....y surge esta exposición, Pepe se entera y nos monta  la visita, un regalazo, y mira que mis expectativas normalmente son muy altas, pues la verdad, superaron todas mis pinkfloydanas expectativas conviertiendo este evento el la guida del pastel del viaje, una pasada en mayusculas.



La exposición va desde las primerizas experiencias de la banda en el Swinging London, con toda su carga psicodelica, hasta las paranoias de Waters con su muro y como nexo de unión toda la musica de la banda, tal como entras que dan unos cascos con audios que iran reproduciendose en cada una de las salas para el disfrute personal del visitante, y que le puedas dedicar el tiempo apropiado a cada una, memorabilia, instrumentos de todas las epocas, trozos de escenario y material antes solamente imaginado por alguien que les ha venerado desde muy joven.








Imposible al final agenciarse el libro de la exposición para ir digiriendo en casa todo este tsunami de información, recomendable para cualquier mortal que haya disfrutado de la musica de este clásico de la musica del siglo XX, la escapada a Londres paga la pena, pero, ojo tiene caducidad. !!! Ya tardais.


1 comentario:

Pepe dijo...

De Pink Floyd se escribe mucho, a diario, y no siempre en plan positivo, la verdad....que si unos dinosaurios, que si pretenciosos, que si acabados, que si repetitivos...
A ver, para entender realmente lo que los Pink Floyd significaron en el London de 1967, hay que hacer un ejercicio de imaginacion muy potente. Hoy estamos acostumbrados a sacar sonidos de lo mas estramboticos con un casio de 20€. En esa epoca, ELLOS crearon la experimentacion electronica y la fusionaron con sonidos mas habituales y con instrumentos muy limitados. Mas alla de la creacion musical, estaba la creacion artistica, que no dejaron de explotar hasta que murieron de exito. Pero no de falta de creatividad. Aunque claro, eso si, mas de uno dira que esto es una barbaridad. Dile a Bob Dylan que haga una sevillana. O a Van Morrison una polka. Zapatero a tus zapatos, cada musico tiene su estilo, y este puede encajar en un momento dado con el interes general, algo que ocurrio a finales de los 60 en un London muy atosigado de drogas y alucinogenos, y puede que no tanto en unos 80 mucho mas estandarizados e industrializados, por lo que es absolutamente normal que decayera el interes en ellos, pero lo que hicieron, su oobra, es perenne. E inolvidable, y magica, y excepcional.
Y eso es lo que deja patente esta exposicion. No dejes de visitarla si algun dia te interesaron Pink Floyd. Si no es asi, olvidalo.