Se ha dicho muchas veces que se puede viajar de diferentes formas aparte de la física, y que hay buenos y malos viajes, uno de mis preferidos es mediante la música, tengo claro que el entorno donde desarrollas tu trabajo inspira y el resultado final muchas veces es muy evidente.
Este es el cado que me ocupa, siempre he tenido una extraña devoción por este personaje que nos dejó hace años pero la vuelta a la escucha de sus trabajos para mi es un ejercicio mas que la de simple escucha y con este en concreto aún mas.
Desde sus comienzos con la banda Mink de Ville en su primer disco cojo el avión y me desplazo al corazón del Spanish Harlem de NYC, con macarras enamorados por la calle y buscavidas intentando ser los faraones de la ciudad, pero después ños siguientes trabajos transitan por el Paris mas bohemio con paseos nocturnos a la luz de la luna siempre desde la parte mas canalla de la ciudad, pero la siguiente parada es New Orleans y aquí es donde estoy ahora con este fantástico Victory Mixture.
Viajamos a 1990 y Willy de Ville nuestro viajero se desplaza a vivir en el corazón de la capital de Louisiana, New Orleans, ya sabéis, caimanes, Mississippi, Voodoo y mucha musica, el caldo de cultivo perfecto para juntarse con lo mejor de cada casa y grabar un disco de versiones junto con los músicos de la ciudad y el resultado es espectacular la voz del castigado Willy se funde perfectamente con los sonidos y ritmos de la ciudad, buenos os dejo, estoy en pleno paseo por Bourbon Street, waiter! another Hurricane please!
2 comentarios:
Te gustan los tios raros, reconocelo. Si este tio fuera en tejanos y camiseta ni lo mirarias.
Te has quedado corto company, las tias también, dime raro, que lo soy ...
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